¿POR QUÉ?

   No puedo más. Confieso que me has ganado la batalla, aunque a decir verdad, estabamos en guerra?, no verdad?, pero eso parecían nuestros encuentros.
He llorado lágrimas en el alma, con ellas lavó aún todas las bellas expectativas que tuve y que he perdido. Me vendí cometas que no pueden surcar el cielo, son simplemente pedazos de papel asidos a un marco rígido y nada útil. No alzarán el vuelo jamás, por más intentos que haga, mis cometas no tienen cauda que los ayude a volar, la cuerda se rompe con gran facilidad.
   Observo extrañada, a punto de la incredulidad. Escucho una voz empequeñecida: "ha llegado la hora de dejar de luchar"...
-¡NO POR FAVOR! -respondo.
-Entiende ya no hay más.
-Es un error que lamentaré
-Ya has lamentado tanto, que algo más, qué más da.
-Que simple se escucha, pero no lo es, y tan solo alzo la vista hacia el cielo, evito mirar a  mi cometa que yace en suelo, y  un grito potente se me escapa:  ¿POR QUÉ?

INTUICIÓN

   Escucharte dulce manjar
armónico sonido tus palabras
un deleite para mi oído
nueva fuerza al pensamiento
que no ceja en su intento
de recordarte
alimentando el deseo
que se resiste a morir.

   Gozo de saberte cerca
a pesar de la distancia.
Interesada estás intuyo
en cultivar el amor.

   Me complazco en saberlo
y sonrío agradecida
porque en la lejana cercanía
presente estás
de mente, alma y corazón.

INFANCIA

   Si busco entre mis recuerdos
aún te encuentro
me pesa en ocasiones
saberme diferente
tomándome la vida tan en serio...

   Hoy tengo la oportunidad
de echar el tiempo atrás...
tuve que crecer rápidamente
era tan solo una niña
y tenía una gran responsabilidad.

   Cuidar de mi abuela
de su salud emocional
ardua tarea para una pequeña
perdí a mi abuelo
pero perdí mucho más...

   Perdí mi infancia
la alegría, el juego.
Al tiempo llegaron
mi guitarra y mis primeros versos
y  me regalaron un dulce consuelo
y pude hablar a través de ellos
hablaban... lo que obligaba a callar.

   Mi infancia recuerdo
en un agridulce
probé las delicias
y luego lloré...
Pero hoy estoy aquí
persiguiendo
aquella niña que fuí.